Si su hijo necesita pruebas de la función pulmonar
Las pruebas de la función pulmonar sirven para determinar si los pulmones de su hijo están funcionando adecuadamente, o en qué medida están respondiendo a los medicamentos. Estas pruebas no invasivas e indoloras se realizan a partir de los 5 o 6 años de edad. Es posible que a su hijo haya que hacerle una o más de estas pruebas, que durarán cerca de una hora en total.
Antes de las pruebas
Informe al proveedor de atención médica si a su hijo le aplica algo de lo siguiente:
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Está usando algún medicamento, incluidos los inhaladores.
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Es alérgico al látex, a la cinta adhesiva o a algún medicamento.
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Ha tenido enfermedades recientemente, tales como un resfriado fuerte o una bronquitis.
Ayude a su hijo a hacer lo siguiente para prepararse:
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Suspender la administración de todo medicamento que le haya indicado el proveedor de atención médica.
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Evitar las bebidas con cafeína, tales como ciertos refrescos, el día de las pruebas.
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Ponerse ropa suelta que no le limite la respiración.
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Seguir cualquier otra instrucción que le den.
Durante la espirometría
En esta prueba se determina el volumen de aire que los pulmones de su hijo pueden contener y la rapidez a la que el niño puede exhalar (soltar el aire) después de inhalar (tomar aire) profundamente. Se trata de la prueba de función pulmonar más común que se hace en los niños. Dura de 10 a 15 minutos. Durante la prueba:
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Su hijo colocará la boca alrededor de una boquilla con un tubo largo. El tubo se conecta a una computadora.
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Una pinza en la nariz del niño impide las fugas de aire por esa vía.
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Su hijo saca aire a través de la boquilla, luego toma la mayor bocanada de aire que puede.
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A continuación, expulsa esta gran bocanada con la mayor fuerza y rapidez posibles, lo más prolongadamente que pueda.
Para confirmar un diagnóstico de asma, tal vez le repitan la prueba después de administrar un broncodilatador a su hijo.
Durante la prueba de difusión
La prueba de difusión mide la rapidez con la que un gas, denominado monóxido de carbono, pasa de los pulmones a la sangre. Su hijo inhala brevemente una cantidad muy pequeña monóxido de carbono de un recipiente. La cantidad de monóxido de carbono utilizada en esta prueba no es perjudicial. El niño exhala el monóxido de carbono y a continuación se mide la concentración de este gas. La diferencia entre la cantidad inhalada y la exhalada ayuda a determinar la rapidez con la que el gas sale de los pulmones. Durante la prueba:
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Su hijo colocará la boca alrededor de una boquilla.
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Una pinza en la nariz impide las fugas de aire por esa vía.
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Su hijo inhala por la boquilla, luego exhala la mayor cantidad de aire posible.
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El niño inhala lo más profundo que puede y lo contiene durante unos 10 segundos.
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Entonces exhala. El aire expulsado se analiza.
Durante la prueba de capacidad pulmonar total
Esta prueba le permite al proveedor de atención médica calcular la cantidad total de aire que pueden contener los pulmones de su hijo. Mide los cambios de presión mientras el niño está respirando. Durante la prueba:
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Su hijo entra en una cabina transparente.
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Se sienta adentro y respira al interior de un tubo largo.
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Mientras su hijo respira, una computadora calcula la cantidad de aire que contienen sus pulmones.
Durante la pulsioximetría
En esta prueba se determina el nivel de oxígeno presente en la sangre. Durante la prueba:
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Se coloca una pequeña pinza que no causa dolor en un dedo de la mano, el lóbulo de una oreja o un dedo del pie.
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Esta pinza se conecta mediante un cable al pulsioxímetro. El pulsioxímetro es un pequeño aparato que mide los niveles de oxígeno.
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La pinza se retira después de poco tiempo.
Después de las pruebas de la función pulmonar
Su hijo podrá volver enseguida a las actividades normales de su vida. Consulte al proveedor de atención médica del niño sobre el momento y la manera en los que debe volver a usar los medicamentos que se habían suspendido para las pruebas. Los resultados de la prueba estarán listos en unos 7 días.
Cómo ayudar a su hijo a prepararse
Usted puede ayudar a su hijo a tener una experiencia más positiva si lo prepara de antemano. La manera de hacerlo dependerá de las necesidades particulares del niño.
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Explíquele a su hijo en qué consisten las pruebas. Use términos sencillos y sea breve. Para la prueba de la capacidad pulmonar, asegúrese de describirle la cabina a su hijo. Sería útil que la vieran de antemano, si fuera posible.
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Los niños muy pequeños tienden a prestar atención durante muy poco tiempo. Por esto, cualquier preparación debe tener lugar poco antes de la prueba. A los niños mayores debe dárseles más tiempo para entender la prueba de antemano.
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Haga que su hijo practique soplar con cornetas de juguete (espantasuegras) o molinillos en preparación para las respiraciones sostenidas que se requieren durante estas pruebas.
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Asegúrese de que el niño comprenda las partes de su cuerpo que estarán involucradas.
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Descríbale lo más claramente que pueda qué sentirá durante la prueba. Además, prepare a su hijo para lo que puede esperar después del procedimiento. Deje que su hijo le haga preguntas.
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Si resulta apropiado, como en el caso de niños en edad escolar, trate de ilustrar la situación con juegos. Esto puede incluir el juego de roles con un juguete u objeto favorito del niño. Quizás a los niños mayores les interese ver imágenes o películas que les muestren claramente lo que sucederá durante la prueba.
Revisor médico: Daphne Pierce-Smith RN MSN CCRC
Revisor médico: Liora C Adler MD
Revisor médico: Marianne Fraser MSN RN
Última revisión:
2/1/2020
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