Health Library Explorer
A B C D E F G H I J K L M N O P Q R S T U V W X Y Z A-Z Listings Contact Us

Datos importantes del desmayo

El desmayo también se conoce como síncope. Es la pérdida del conocimiento durante un período breve. Dura solo uno o dos minutos y, luego, hay una recuperación total rápida. Suele estar relacionado con la pérdida del tono postural que causa caídas o la necesidad de acostarse. En una persona sana, el desmayo puede no ser motivo de alarma. Pero en casos poco frecuentes, puede ser un signo de que hay otra afección de salud grave. La causa del síncope suele ser un descenso repentino en la presión arterial o en la frecuencia cardíaca que provoca una disminución del flujo de sangre al cerebro. Antes de desmayarse, es posible que sienta las palmas sudorosas, mareos, aturdimiento, problemas para ver o náuseas. 

En los jóvenes, el problema no suele tener una causa grave, aunque las caídas relacionadas con el desmayo pueden provocar lesiones. Pero en algunos casos, puede deberse a un problema del corazón que es más preocupante. Entre los desencadenantes, se incluyen los siguientes:

  • Estrés intenso

  • Miedo u otras emociones fuertes

  • Estar parado durante un largo tiempo

  • Ponerse de pie de repente

  • Toser muy fuerte

  • Deshidratación o pérdida de líquido corporal

  • Exceso de calor

  • En ocasiones muy poco frecuentes, las sustancias estimulantes, como la cafeína

El desmayo en una persona mayor, en una persona con una enfermedad del corazón, durante un esfuerzo o mientras está acostado puede ser motivo de preocupación. En cualquiera de estos casos, debe llamar al proveedor de atención médica. Es importante intentar diagnosticar la causa del desmayo. Puede resultar difícil determinar la causa si el desmayo fue un evento único.

Entre las causas graves, se incluyen las siguientes:

  • Ritmos cardíacos anormales acelerados o lentos

  • Enfermedad de las arterias coronarias

  • Enfermedad grave de las válvulas del corazón

  • Coágulo de sangre en el pulmón (embolia pulmonar)

  • Recuento bajo de glóbulos rojos (anemia) o pérdida de sangre

  • Efectos secundarios de los medicamentos

  • Deshidratación, aunque no es muy común 

La mayoría de las personas que se desmayan permanecen desmayadas entre unos segundos y menos de un minuto. Si la persona permanece inconsciente por más tiempo, llame al 911. Siempre informe al proveedor de atención médica si se desmayó.

Pruebas frecuentes para el diagnóstico

Para saber si la causa del desmayo es grave, el proveedor de atención médica le preguntará sobre la frecuencia con la que se desmaya, cuánto dura el desmayo y los eventos relacionados con los episodios. Según las circunstancias en las que ocurran estos episodios, el proveedor puede indicarle las siguientes pruebas:

  • Electrocardiograma (ECG). Con esta prueba, se obtiene información sobre el ritmo cardíaco y la frecuencia cardíaca.

  • Ecocardiograma. Permite observar la estructura del corazón, incluidas las válvulas.

  • Signos vitales ortostáticos. En esta prueba se miden la frecuencia cardíaca y la presión arterial mientras está acostado, sentado y de pie. Esto es para ver si hay un cambio relacionado con la posición del cuerpo.

  • Prueba de la mesa inclinada. En esta prueba, lo sujetan con correas a una mesa mientras está acostado y, luego, lo llevan a una posición de pie a un ritmo constante. La presión arterial y la frecuencia cardíaca suelen medirse para evaluar si hay cambios. Es posible que le administren medicamentos para provocar estos cambios. El objetivo general de la prueba es intentar reproducir el desmayo y evaluar si va acompañado de un descenso repentino de la presión arterial o de la frecuencia cardíaca.

  • Monitor cardíaco ambulatorio o holter implantable. Si el proveedor de atención médica cree que la causa del síncope puede estar relacionada con el ritmo cardíaco, es posible que le indique que use un monitor cardíaco durante hasta 4 semanas o le recomiende implantar un holter debajo de la piel para hacer un seguimiento del ritmo cardíaco a largo plazo.

Otras pruebas que se pueden hacer, pero que son menos frecuentes, son una prueba de esfuerzo, una tomografía computarizada y una resonancia magnética.

Qué debe hacer

  • Intente descubrir qué es lo que lo hace desmayarse. 

  • Pregúntele al proveedor de atención médica qué puede hacer para prevenir los desmayos. Por ejemplo, el proveedor puede sugerirle lo siguiente: 

    • Levántese despacio si estuvo sentado o acostado durante un período largo. Ejercitar las piernas cuando está de pie durante períodos largos permite mantener la sangre en movimiento.

    • Consuma alimentos o líquidos que contengan sal, como galletas saladas, pretzels o una bebida para deportistas. La sal aumenta la presión arterial, por lo que es menos probable que haya un descenso repentino. Pero la sal agregada no es buena para muchas personas que tienen presión arterial alta. Pregúntele al proveedor antes de aumentar el consumo de sal.

    • Use medias de compresión

  • Haga lo siguiente si siente que se va a desmayar:

    • Asegúrese de estar en un lugar seguro, luego, siéntese de inmediato para no caerse y lastimarse.

    • Una vez que esté sentado en una posición segura, acuéstese. Apoye los pies sobre algunas almohadas o una chaqueta de modo que queden por encima del nivel del corazón. Esto aumenta el flujo de sangre al corazón y, a su vez, al cerebro. Y eso es exactamente lo que necesita.

    • Si no puede acostarse, coloque la cabeza entre las rodillas para aumentar la circulación hacia el cerebro.

    • Colóquese de lado para evitar atragantarse si siente náuseas.

  • Si se desmaya, permanezca acostado durante 10 o 15 minutos una vez que se despierte. Verifique si tiene una lesión importante, como un golpe en la cabeza o una lesión en la cadera. Además, pruebe mover las piernas y, luego, levántese despacio.

  • No vuelva a conducir hasta que el proveedor de atención médica considere que es seguro.

© 2000-2025 The StayWell Company, LLC. All rights reserved. This information is not intended as a substitute for professional medical care. Always follow your healthcare professional's instructions.
The health content and information on this site is made possible through the generous support of the Haspel Education Fund.
StayWell Disclaimer